
Cuándo operarse
La elección del día de la cirugía tiene gran importancia
Actualizado | 26/Diciembre/2017
Es difícil decidir cuándo es el mejor momento para someterse a una cirugía. En el caso de padecer una patología maligna o lesión premaligna cuyo principal tratamiento es la cirugía, es obvio que una intervención precoz es lo más adecuado para evitar la evolución y mejorar el pronóstico. Es diferente cuando la paciente debe seleccionar una fecha para una cirugía electiva. Desde nuestro punto de vista, los principales factores a tener en cuenta son los siguientes:


1. La paciente debe estar psicológicamente estable y saber a lo que se va a someter y por qué lo va a hacer. Decidir someterse a una cirugía implica conocer las posibles complicaciones a los que nos enfrentamos, y saber qué resultado podemos obtener una vez realizada y superado el postoperatorio. Por ello, es imprescindible un adecuado asesoramiento y relación cercana con su cirujano y el equipo que le va a tratar. Antes de entrar el quirófano la paciente no debe tener ningún tipo de dudas sobre el procedimiento y todos los aspectos relacionados con el postoperatorio, sin ningún tipo de temor o miedo.
2. Se debe confiar plenamente tanto en el cirujano como en la clínica que se va a intervenir. No debe dudar en acudir a la consulta las veces que sean necesarias antes de decidir someterse a una intervención. Entre la paciente y el cirujano deben acordar los objetivos que son posibles conseguir, siendo realistas y con toda la cercanía posible. Conozca más sobre el cirujano en el apartado Elegir Cirujano.
3. En el momento de la intervención, la paciente debe encontrarse con un buen estado de salud, tanto física como mental. Por ello, la consulta y pruebas preoperatorias buscan garantizar cualquier alteración desconocida que pueda provocar alguna complicación o poner en riesgo a la paciente durante o después de la intervención. Consulte nuestro apartado Preoperatorio.
4. Debe encontrar una fecha adecuada. Todas las épocas del año tienen sus ventajas e inconvenientes, por eso, tiene prioridad aquella que altere lo menos posible la vida social y laboral de la paciente, así como la de sus familiares. Por este motivo, es imprescindible conocer tanto los días de ingreso como los de reposo, y saber cuándo podrá incorporarse a una vida normal como la que tenía antes de la intervención.